Decía Confucio que “Un hombre no trata de verse en el agua que corre,
sino en el agua tranquila, porque solamente lo que en sí es tranquilo puede dar
tranquilidad a otros”
La serenidad nos aporta bienestar, nos aleja de decisiones precipitadas,
nos permite saborear sin juicio, sin expectativas, sin sufrimiento el aquí y el
ahora, es decir, la vida.
En este ajetreado mundo en el que vivimos cultivar la serenidad es un
gran acto de amor para nosotros y para todo lo que nos rodea, para todos los
que nos rodean.
Hablamos de actitudes y no de hábitos, porque la actitud es un acto
consciente mientras que el hábito es algo mecánico, y sólo poniendo consciencia
hallaremos la verdadera serenidad.
1.
RESPIRACIÓN CONSCIENTE
Dedicar unos minutos al día a la práctica de la respiración consciente
tiene beneficios tanto físicos como mentales, y por tanto emocionales.
Ser conscientes de que no importa lo que ocurra fuera, una parte de
nosotros se va a encargar siempre de recoger lo que nos mantiene vivos, el
oxígeno que necesitamos para todo lo que realizamos.
Ser el observador de ese proceso mágico que tiene lugar sin nuestra
consciencia, e invitar a esta a participar en el proceso, parar lo que estamos
haciendo y acompañar a nuestra respiración, notando en nuestro cuerpo como el
aire frío penetra por nuestra nariz, recorre nuestro cuerpo… Como eliminamos el
dióxido de carbono, caliente, inútil…
2.
ESCUCHA CONSCIENTE
Escucha la vida, sin pensar, sin juzgar, cierra tus ojos unos minutos, y
escucha lo que ocurre a tu alrededor.
Los sonidos de la Naturaleza son los más adecuados para alcanzar la
serenidad y los ideales para comenzar esta técnica, así como mantras o músicas
relajantes.
3.
VISUALIZACIÓN DE TU LUGAR DE
SERENIDAD
¿Existe un lugar para ti en el que te sientas realmente sereno? Si no es
así ¿Cómo sería? Constrúyelo en tu mente y dedica unos minutos al día a
visualizarlo en actitud de meditación, sentado o tumbado, alcanzando la paz que
alcanzas allí, en tu refugio particular, donde solo entran las emociones y los
pensamientos que tú quieras llevar.
4.
CREA TUS PROPIOS MANTRAS DE
SERENIDAD
El uso repetido de afirmaciones positivas elegidas por ti mismo ayuda a
controlar los pensamientos automáticos que te alejan de la serenidad. Respira
profundamente y repítelos…
5.
EJERCITA LA COMPASIÓN
Si existe una cultura que cultive la serenidad es sin duda la oriental,
y la compasión está en la base de todas sus variantes.
Cultivar la empatía, la conexión con las dificultades ajenas y propias
desde una actitud de amor, de comprensión, de no lucha, desde el desapego y la
aceptación de la neutralidad de las cosas, nos otorga serenidad, nos conduce al
camino del corazón que es un camino sereno, plácido…
6.
DALE UN LUGAR PRIVILEGIADO A LA
GRATITUD
Siempre, siempre, siempre tenemos algún motivo para estar infinitamente
agradecidos por el simple hecho de estar vivos. Agradecidos a nuestro organismo
que es capaz de respirar sin nuestra intervención consciente, agradecidos por
haber aprendido a ponerle consciencia y otorgarle mayor calidad y calidez a
este acto continuo.
Agradecidos a la música, a los sonidos de la naturaleza, a los
silencios, a nuestros sentidos que nos otorgan el regalo de sentir la vida.
Agradecidos a quien sembró la semilla que hoy es un pan que nos
alimenta, al camarero que nos puso ese café calentito con el que ponernos a
tono.
Agradecidos de tener una consciencia que nos permite darnos cuenta de lo
afortunados que somos y que nos permite entrar en el estado de gratitud, que
comparte raíz lingüística con el estado de gracia…
7.
PERDONATE Y AMATE
Cualquiera que sea el error que a TU JUICIO has cometido, cualquiera que
sea el daño que has ocasionado o te has ocasionado a ti mismo, perdónate.
Sólo aprendiendo a perdonarte podrás perdonar a los demás, podrás
entender, que en el fondo, no hay nada que perdonar que somos maravillosos
seres que hacen lo que pueden con los recursos que han descubierto, que
perdonar y amar son las auténticas llaves para acceder al resto de ellos.
Que perdonarte y amarte es asumir que la vida es maravillosa, que tú
eres maravilloso, que la serenidad está ya en ti…
https://triskelate.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario