viernes, 14 de septiembre de 2018

16.- Bendición de la paciencia. Del Libro Treinta y Tres Bendiciones, para una nueva Realidad. Por Ashamel Lemagsa.



Amados…

Generalmente la paciencia se la conecta con una actitud de resignación…

Cuando, en realidad, la paciencia es un estado de  pacífica actividad.

En ciertas ocasiones se dice…

“Las situaciones son así, no las puedo modificar, pues… paciencia.”

La paciencia es una actitud  conectada con la Paz Interior.
Ser paciente es ejercer la paz  interior de manera consciente, no implica que debemos resignarnos a situaciones insostenibles, que nos hieren, maltratan o no aportan nada positivo a nuestras vidas.

La paciencia, es la calma necesaria para aclarar las situaciones y posteriormente decidir cómo ejecutar las transformaciones.

Los Creadores, necesitan de la paciencia, de esa paz interior consciente para saber cuándo actuar, en el momento adecuado y así lograr un resultado acorde a la paciencia desarrollada.

La paciencia es el tiempo adecuado que se necesita para reorganizar una situación, una relación o un tiempo de dificultades, donde no podemos decidir de manera casi automática.

Ser paciente implica avanzar con moderación, no es paralizarnos para que todo nos pase por arriba de nosotros, sin poder contener o encauzar los hechos.

Ser paciente es desarrollar la capacidad de no ser afectados por la ansiedad que marca el tiempo cronológico terrenal, pues cuando, el tiempo, se lo siente a nuestro favor, fluimos en él, permitiendo que modele las situaciones.

A veces el Ser que es paciente se lo confunde con un cobarde, pero está muy lejos de serlo, el paciente desarrolla una capacidad infinita de avance a un ritmo preciso, equilibrado, pero luminosamente seguro, aunque no se sea consciente de ello.

La paciencia es el arte de avanzar en silencio, con la seguridad que las metas se alcanzan, siendo pacientes.

Una casa, por más sencilla o pequeña que sea, no se construye en dos horas, necesita materiales, tiempo y paciencia para resolver los avances, las detenciones y sortear todos los obstáculos que se van presentando.

Cuando iniciamos un trámite jubilatorio se necesita muchísima paciencia para juntar y presentar los papeles correspondientes desde el inicio del trámite hasta su finalización, para certificar nuestro estado laboral, pero además dependemos de la atención y paciencia del empleado que nos recibe para que resuelva satisfactoriamente nuestro tramite.

Saliendo un poco de lo materialmente terrenal… nuestro despertar de consciencia, llegará a través de un paciente trabajo personal, donde la honestidad hacia nosotros mismos es la actitud inicial para todo ascenso evolutivo.

Ser pacientes implica Ser conscientes que las pequeñas y grandes metas no se obtienen en la mayoría de los casos cuando lo queremos, por el contrario serán en el momento preciso y solo la paciencia hará que la espera y el trabajo previo que debemos realizar con paciente responsabilidad, darán sus frutos cuando deba ser y como debe ser, aunque no sea exactamente como lo esperábamos.

Ser pacientes es Ser activamente pacíficos desde el amor ilimitado.

La paciencia nace de los corazones comprensivos, compasivos y… valientes, pues se necesita valor y fortaleza para ser Luminosamente Pacientes.

La Paciencia es un atributo…
Obtenido con mucha paciencia,
Hacia uno mismo, en primerísimo lugar
Y después…
Con todos y con todo.
Así es!!!

Los Amo!!!
Con Amor, Ashamel Lemagsa.


Video: El Tesoro de la Vida



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