miércoles, 5 de septiembre de 2018

13. Bendición del Perdón. Del Libro Treinta y Tres Bendiciones, para una nueva Realidad. Por Ashamel Lemagsa.


Amados…

Hoy bendecimos el Perdón como un sendero de sanación que existe desde nuestra Esencia Divina.

Nuestra Esencia es Amor, entonces, ese amor nos transforma en sembradores de perdón.

Por qué a veces nos cuesta tanto perdonar???

Qué nos impide perdonar????

Nuestro Ego herido, que reclama una compensación por tanto dolor sentido,  nos conduce a la ira, la venganza, el orgullo, el rencor que  nos impide perdonar desde la aceptación de lo que fue y ya no es.

El perdón nace desde el amor infinito de Dios hacia nosotros, Dios nos ama ilimitadamente, por eso, en Dios no existe la venganza o la eterna culpa, inventos del Ego.

Somos responsables de nuestros actos, pensamientos y emociones, pero la culpa es una emoción, propia del ego, que nos mantiene estancados en el miedo y la confusión.

La emoción de culpa tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás nos aleja del perdón, nos aleja de Dios en nosotros.

Cuando perdonamos desde el amor de Dios en nosotros, logramos soltar el lastre del dolor que se queda adherido tanto en nosotros como en los demás.

Perdonar es saber soltar a tiempo, antes que llegue el rencor  y se apodere de nuestra Paz Interior, alejándonos de nuestra Esencia Divina.
Cuando perdonamos, sabemos que las leyes cósmicas actúan inexorablemente, tanto para nosotros como para los otros y la verdadera justicia, la Divina, siempre llega a equilibrar las energías desbordadas, escasas o mal aspectadas por el ego.

El ego es el que no perdona, el corazón es amor y sabe perdonar.

Quien sabe perdonar, conecta su corazón a Dios, siente el amor Divino y se libera del dolor, suelta toda situación, recuerdo o relación dolorosa o tóxica para su vida y para todos aquellos que están conectados con él.

Quien sabe perdonar, se ama a sí mismo y se respeta y porque se respeta perdona, pues comprende que en el rencor o el odio se está hiriendo a sí mismo.

Quien sabe perdonar es compasivo, comprensivo, logra ponerse en el lugar del otro, a pesar que no siempre esté de acuerdo con el otro, comprende las razones ajenas y perdona.

Perdonar es el bálsamo para mantener el equilibrio y la paz interior, sana las heridas, eleva el corazón a la Esencia Divina.

Perdonar no implica que el cosmos no responda a nuestros actos, la Ley del karma se cumple inexorablemente, pero al perdonar y perdonarnos realizamos una gran liberación de energía de amor, que logra alinearnos con lo Divino que existe en nosotros, de esta manera se adquiere un aprendizaje muy importante…!!!

Comprender que…

El enojo, el rencor, el odio y la venganza son las respuestas del ego…
El ego es ese personaje que vino a mostrarnos las sombras que debemos perdonar, soltar y sanar.

Entonces…

Quien sabe perdonar, sana, pues  se eleva al corazón en el Amor de Dios.

Quien perdona transmuta ego por corazón, dolor por amor.

Oremos…

Hoy y para siempre Bendigo el acto sincero del corazón por perdonar todo.

Perdonar mis errores, pues fueron aprendizajes que me costó mucho esfuerzo adquirir.

Perdonar los actos ajenos, que de alguna manera me afectaron, pues al perdonarlos, le otorgué la Divina oportunidad de auto sanarse a sí mismos y a todos aquellos que me involucraron en sus actos negativos.

Hoy y para siempre comprendo que perdonar es uno de los actos de Amor, más importantes y sublimes que el ser humano puede ejercer hacia sí mismo y hacia los demás.

Me perdono, porque me amo.

Te perdono, porque me amo y te Amo.

Perdonar es AMAR!!!

Así es!!!

Los Amo!!!

Con Amor, Ashamel Lemagsa.


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