Dios en
Ti…
Capítulo:
7
Amados…
Una breve historia…
Caminaba una madre junto con su pequeño hijo, ambos de la mano,
conversando…
Cuando pasan por las
cercanías de una Iglesia…
El niño se detiene y la
pregunta a su madre:
“Mamá…¿Qué es esa construcción tan grande?”
La madre, responde: “Es
la Casa de Dios”…
(Señalando la Iglesia.)
Fin de la historia.
***
Después de escuchar
este breve diálogo, mientras caminaba disfrutando el sol de la mañana, me
imaginaba al niño buscando dentro de la Iglesia a Dios, llamándolo, pero sin
escuchar una respuesta, sin lograr ver a un señor de largas barbas y mirada
bondadosa.
Desde pequeños nos
instruyeron según nuestra cultura, que Dios está en un determinado lugar,
llámese templo, iglesia, montaña, Sol, Pirámide, etc., etc.…
También nos enseñaron a
orar mirando al cielo, en busca de Dios…
De adultos implorando
ayuda Divina, que está muy lejos…
Siempre buscando afuera
de nosotros, así fueron las enseñanzas de nuestros padres y ancestros…
Construimos altares,
imágenes, pintamos cuadros, murales en las paredes de los Templos,
construimos el Vaticano…
Todo en honor a Dios…
Me pregunto en qué
momento, Dios pidió que se construyan esas enormes estructuras en su honor,
para elevar plegarias o recibir ayuda Divina.
De mi parte, realmente
siento que Dios jamás lo pidió, pues,
Dios es amor puro.
No necesita que lo adoren dentro de un templo,
pues lo trasciende.
Aquellos que construyeron
templos, en su nombre, a mi entender, no supieron interpretarlo.
Dios vive EN NOSOTROS!!!
Su Templo
es el corazón!!!!
Crecemos en una sociedad
donde nos forman desde niños que lo
“superior” está ubicado fuera de nosotros y muyyyy alto, casi imposible de
alcanzarlo, solo los Maestros, llegan a conectarse con lo Superior.
Nos instruyeron que
Dios nos juzga, que nos coloca obstáculos en nuestro crecimiento personal, pues
“algo habremos hecho mal”…
Con el correr de los
años, algunos sueltan la búsqueda de Dios, al no encontrarlo afuera y prefieren
seguir a un “Gurú”, Maestro, Profeta o Tratado de sabiduría, pues de esta
manera por lo menos lo tienen un poco más cerca y hasta pueden llegar a
mantener un diálogo, aunque en algunas ocasiones deban pagar una suma de dinero
para lograr una breve charla…
La búsqueda sigue…
El tiempo transcurre y
Dios que no aparece, por ningún lado…
Pero un día, agotados
de buscar “lejitos”…
Sentimos que la
búsqueda de Dios afuera de nosotros nos distrae del verdadero estado de Gracia,
de Dios que podemos sentir, por Derecho Divino.
Entonces…
Comenzamos la búsqueda
inversa… hacia adentro del Ser.
Pero, nos topamos con
el Ego y el despliegue de sus argumentos sostenido por milenios…
Como por ejemplo…
“No eres
suficientemente bueno o puro para recibir a Dios”…
Entonces…
Saltan las culpas, el
dolor, el miedo al castigo Divino…
Si continuamos buscando
adentro de nosotros debemos vencer un gran desafío… el vernos a nosotros
mismos, con las sombras y las luces…
Si desistimos en la búsqueda interior… regresamos hacia afuera,
allí, no encontramos a Dios y si bien, es un ambiente “conocido”, con
respuestas conocidas, regresaremos a la confusión de los mensajes contradictorios…
Tienes Libre Albedrío…
Quizás decidas seguir
buscando en tu interior, si así lo decides, deberás iluminar tus propias sombras como, por ejemplo, el
orgullo, la vanidad, el rencor, la envidia, los celos.
Las sombras se sanan
con LUZ!!!!!, para lo cual debes sostener tu Luz, incrementándola a cada
instante.
Recuerda, centrarte en
ti!!!…
Donde hay rencor…
incremente el perdón.
Donde hay odio…
incrementa la compasión y el amor.
Donde hay celos…
Incrementa la comprensión.
Donde hay orgullo…
Incrementa la humildad.
Donde hay ira…
Incremente el Silencio Interior.
Donde hay descontrol… auto control desde el respeto hacia ti mismo.
Si quieres cambiar tu
mundo exterior, cambia tu interior.
Si quieres conectarte
con Dios, inicia el viaje interior, iluminándote con amor, perdonándote,
sanándote, en la reconciliación contigo.
No eres culpable… solo
tienes aprendizajes que adquirir.
Nadie te castigará…
solo atravesarás pruebas para aprobar el examen pendiente.
Nadie te juzga… solo tú
buscarás el mejor sendero para sanarte desde la luz.
Todos somos portadores
de la Chispa Divina, es la energía Crística que nos recuerda que salimos de la
Fuente, con un pedacito de Dios en nosotros.
Esa Chispa de Dios, está
encarnada en ti y viajará contigo a través del tiempo y el espacio.
Cuando llegaste a la
Tercera Dimensión, portas una personalidad acorde a la densidad de este Plano
3D, así se crea una separación entre ti y tu Chispa Divina, pero esa
separación, ese velo, se está corriendo en el Despertar de Consciencia actual,
cuando comprendes que Dios habita en ti y a través de Él formas parte de su
Creación, pues eres una parte del “Gran Tablero Divino”, comienzas a sentir a
Dios en ti.
En el instante que
comienzas a trabajar en tu auto observación, sientes como si miraras una
película que se proyecta ante ti, recorres tu vida, comprendiendo que cada
“error” fue un aprendizaje, que tus “verdugos” fueron tus mejores Maestros,
pues sacaron de ti, las pasiones más extremas, para ser soltadas y sanadas…
Comprendes, que Dios
siempre estuvo a tu lado, sosteniendo tu andar, guiando tus sentires, sembrando
tu sendero de luces para despertarte en el Amor.
Entonces, por ejemplo…
Cómo sanar la ira
escondida en tu interior, si a tu vida no llega algún acontecimiento kármico, para
sacarla a la luz y así lograr comprender que el odio, genera rencor y en el
rencor se actúa con ira y ella es la expresión de… falta de amor a nosotros
mismos, pues nadie quiere hacerse daño a sí mismo, pero con actitudes,
emociones y pensamientos impregnados de
ira, nos herimos a nosotros mismos, sumado a las heridas que le causamos a los
otros.
Creamos una cadena de
dolor, donde los eslabones nos mantienen separados de Dios en nosotros, cuando
no iluminamos nuestras sombras, cuando no nos hacemos conscientes de la
presencia de ellas en nuestro interior, aunque todos los domingos concurramos a
un templo religioso, ellas continuarán manifestándose.
Sin culpa, con
aceptación, compasión y humildad soltemos los eslabones del dolor, para auto
iluminarnos en nuestra Paz Interior.
En tu Paz Interior,
escucharás la voz de tu Alma, ella te acercará a tu Ser Superior y desde él, Dios
en ti te guiará.
Es una escalera de Amor
ilimitado donde tú mismo puedes ascender, sin más ayuda que tu firme voluntad
de ser comunión con Dios, nadie ni nada te lo impide.
Finalmente, recuerda…
El Ego, es la personalidad
que traes a esta vida para ser sanada; ella es la portadora de todos los
aprendizajes que debes “aprobar” para seguir en tu sendero de ascensión.
No es un enemigo, tampoco tiene como meta ser un obstáculo para
tu evolución, simplemente saca a la luz, tus propias sombras, algunas de ellas,
acumuladas de otras vidas, para ser sanadas en la luz del amor ilimitado.
Dios en ti, es tu gran
sanador, pacientemente espera que aceptes que hagas lo que hagas y sientas lo
que sientas, Él siempre te acompañará,
jamás te “suelta”, pues forma parte de ti, es la Monada de Amor Divino, que te
fue entregado cuando naciste como Ser individual.
La densidad te mantiene
lejos de la conexión con Dios, en la medida que te auto sanas, cuando liberas
las sombras en la energía del amor estás creando tu sendero interior para una
conexión con los Planos Superiores.
En tu ardua tarea de auto iluminarte, Dios te sostiene y abre en ti
el sendero de la compasión, el perdón y la liberación definitiva desde el amor
infinito.
Recuerda que tanto las
emociones, como los pensamientos y las acciones negativas, se sanan
desarrollando la energía opuesta.
Si eres egoísta,
desarrolla la generosidad desinteresada.
Si eres celoso/a desarrolla
la comprensión y la confianza.
Los celos, por ejemplo,
surgen del Ego Personalidad, es la sombra que sale a la superficie para que seas
consciente de ella y la sanes a través de la Luz de la comprensión amorosa.
La densidad nos arraiga
al miedo de “perder” algo, pero la espiritualidad nos conduce al amor
desinteresado, donde no existe el miedo, no hay espacio para el miedo, porque
no hay apego y en el desapego se logra la soberanía espiritual.
Cuando sientes miedo,
no amas, tratas de poseer al otro o a los otros, crees que en el dominio, no
sentirás el vacío de la soledad, pues en la soledad está presente el silencio y
en él corres el riesgo de sentirte a ti mismo y como te contaron que eres
“culpable” de los pecados de hoy y de ayer, prefieres rodearte de personas,
templos, Tratados, Guías y no sentirte a ti mismo.
El que siente miedo es
el Ego Personalidad, pues tu Ser Divino, tu Esencia, carece de miedo, ella está
esperando que la encuentres en ti mismo.
El Despertar de
consciencia es…
Viajar al Interior de
ti mismo, reconocerte como un Ser Divino, entregarle el comando a Dios en ti y
agradecer la existencia del Ego Personalidad, pues gracias a sus “servicios”,
puedes Auto sanarte en el Amor Crístico.
Cuando le entregas el
poder a Dios en ti, el Ego trabaja al
servicio del corazón, en unidad, del Amor Ilimitado, para ser Fuente de Paz y
armonía .
Entonces…
Oremos…
Amado
Dios en Mi…
Te
entrego mi Voluntad Humana,
para que
en comunión con tu Divina Voluntad,
Seamos
UNO en el Amor Ilimitado.
Para que la
Paz sea mi mejor estado espiritual.
Para Ser Luz
en el Despertar de Consciencia.
Amén.
Gracias.
Los Amo.
Con Amor, Ashamel
Lemagsa
No hay comentarios.:
Publicar un comentario