Manifestar la esencia de lo que somos, nos abre los ojos para saber dónde estamos prestando nuestra atención. Desarrollar nuestra visión creativa y perfeccionarla es la energía que vibra hoy y para toda este ciclo, así que ser nosotros mismos y reconocernos es lo que nos ayudará a manifestar una visión clara y verdadera de hacia dónde nos dirigimos.
Poner atención a lo que nos hace crecer, es imperativo para perfeccionar nuestra conexión Tierra, hacer consciente el rumbo que nos marca la causalidad, a través de sincronías y mensajes de la Tierra, es ponernos al servicio de nuestro propio florecimiento para producir la visión creativa que queremos de nuestra vida. Nuestra evolución personal se basa en descubrir quiénes somos, en ser leales a nuestra frecuencia energética y no pretender ser alguien que no somos.
Acepta que tu esencia son las raíces que permiten tu crecimiento personal, ellas van muy adentro en la Tierra, porque tienen que sostener después el crecimiento perfecto, manifestando la libertad de florecer a lo que uno es. La receptividad son las ramas que se multiplican y se esparcen para recoger los rayos del sol, la lluvia, el viento, que alientan al crecimiento de nuestro Ser. Estar receptivos es prestar atención a lo que nos llega, y filtrar a través de las sensaciones aquello que es importante para nuestro crecimiento y lo que no.
Nuestras hojas son las que permitirán evolucionara nuestra esencia , son las que volarán a otros lugares, elevándose con el viento, recorriendo grandes distancias para volver a la Tierra y empezar de nuevo el ciclo de la vida. Ha llegado el momento de manifestar lo que somos en realidad, deja de luchar contra estereotipos, de lo que te gustaría ser y en realidad no eres,que no vibran con tu esencia. Empieza a crear la visión en tu mente de quien eres, perfecciona las visiones acerca de ti mismo, eso será lo que permitirá manifestar tu Yo real, es lo que permitirá que puedas sentirte libre y sin ataduras para poder volar.
Prestar atención al instante nos permite enfocarnos en lo que es realmente importante, manteniendo la distancia perfecta con nuestros problemas para que desde la mente superior sepamos escoger las decisiones más sabias que permitan nuestro florecimiento. Dejarte llevar por la sincronicidad de los instantes, permitirá tomar el rumbo de tu crecimiento, ampliando tus raíces para que se conecten con tu esencia primigenia, siendo tierra fértil para poder florecer sin miedo y sin ninguna duda de lo que eres y has venido a ser.
¿Dónde estás prestando tu atención?
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