Juan capítulo 12
20
de Julio de 1938, a las 5 hrs de la tarde;
al
lado de los siete lagos de Rila.
Reflexión
La gente contemporánea no entiende la vida en
su sentido profundo e interno, porque no tiene una imagen clara sobre los
comportamientos que existen entre sus pensamientos, sentimientos y actos. Para
que trabaje conscientemente sobre sí, el hombre debe entender estos
comportamientos.
El
pensamiento tiene que ver con el mundo Divino, el sentimiento – con el
Espiritual, y el acto – con el físico. Por lo tanto, tal como es el
comportamiento entre estos tres mundos, así debe de ser el comportamiento entre
los pensamientos, los sentimientos y los actos del hombre. Ahora como estáis
sentados en esta cima y observáis el cielo, veis que las nubes están por debajo
de vosotros. Si estuvieran por encima de vosotros, os interesaríais de lo que
hay por encima de estas nubes, ahora miráis libremente sobre ellas. Sin
embargo, para la gente que está abajo, las nubes están sobre ellos. Ellos no
ven lo que hay por encima de las nubes. Las nubes están por debajo de nosotros
puesto que las energías predominantes de la tierra y del cielo son positivas.
Como consecuencia de esto en la atmósfera hay una gran presión. Las nubes
sirven como frontera entre los dos mundos: el de arriba y el de abajo. El mundo
superior ejerce una gran presión sobre el inferior, pero el inferior por su
parte le contrarresta. Esta es la causa por la cual de nubes tan densas no
puede caer lluvia. Lo mismo que ocurre en la Naturaleza, ocurre también en el
hombre mismo.
Frecuentemente
entre el mundo superior y el inferior dentro del hombre nace cierta
contradicción, como consecuencia de la cual él cae en estados obscuros y
pesados. En esta situación decimos que el mundo del ser humano está dividido.
Para que salga de este estado él debe mejorar el estado de su estómago. En el
ser humano el estómago representa el mundo físico. Si el hombre no entiende las
leyes de su estómago, de la digestión y de la materia densa con la cual se
encuentra en cierto contacto, el mundo físico será inalcanzable para él y él no
podrá utilizarlo. Cuando lleguéis al mundo Espiritual, comprenderéis que su
representante son los pulmones, o sea, el sistema respiratorio del hombre. El
que entiende las leyes de la respiración, entiende las leyes del mundo
espiritual.
Cuando
vivís en sitios planos, vuestra respiración es tranquila y suave, porque os
habéis acostumbrado a estas condiciones. Sin embargo, ahora respiráis
difícilmente, os sofocáis. ¿Por qué? - El aire montañoso es más ligero y más
enrarecido. Vuestros pulmones ahora están haciendo un trabajo forzado. El
movimiento por las montañas altas mejora el estado del sistema respiratorio, he
aquí porque el que quiere mejorar el estado de sus pulmones debe subir por
sitios altos. Una vez que mejore el estado de su sistema respiratorio, junto
con esto él adquiere mayores posibilidades para la vida espiritual. He aquí
porque desde tiempos antiguos hasta hoy, toda la gente que ha trabajado y
trabaja espiritualmente ha visitado las cimas montañosas altas. Los que
entienden las leyes del mundo espiritual, utilizan razonablemente las cimas
altas. Los que no entienden estas leyes serán como los pastores: cuando el
tiempo empeora ellos se apresuran para descender cuanto antes en el valle.
En
este aspecto la montaña es severa. Ella castiga a cada uno que no respeta las
leyes de la Naturaleza. La montaña aguanta solo a aquellos que viven
armónicamente. Si ellos no viven armónicamente, ella envía la lluvia, viento,
truenos, relámpagos y les obliga a descender abajo.
La
montaña no aguanta ningún descontento. Descontento está solo aquel que no
entiende los caminos Divinos.
El
hombre puede estar descontento por dos razones: o bien por escasez o bien por exceso
en su vida. Alguien está descontento porque no tiene suficientes recursos para
vivir. Otro es descontento porque le han puesto 100 kg de oro sobre su espalda,
que él debe llevar. Entonces el oro es necesario para hombre hasta el punto en
que él puede introducirlo en su sangre y ponerlo en circulación en sus
pensamientos, sentimientos y actos. Sólo el oro orgánico penetrado en la sangre
del ser humano es capaz de mejorar su vida.
Este
oro es conductor de la fuerza vital, el así llamado prana vital de la
Naturaleza. Así que cuanto menos oro orgánico tiene el ser humano en su sangre,
tanto más grandes serán sus sufrimientos. De la cantidad de este oro depende
también la vida moral del hombre.
De
este oro ha hablado Cristo. Él ha expresado esta idea a través del versículo:
“Haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen.” Así que
el hombre no puede entender el mundo Divino hasta que no traslade su oro en su
cabeza. El ser humano ha venido a la Tierra para aprender las leyes del mundo Divino.
Hace tiempo él tuvo alguna imagen de este mundo, pero esta imagen hoy en día no
lo satisface. La comprensión de la gente cambia en dependencia de la época.
Según
la ley de Moisés, el que se permite en el día de sábado recoger varitas, será
condenado a muerte. Si esta ley tuviera poder hoy día, ¿cuantos de vosotros
quedarían vivos? Desde que habéis venido a la montaña, cada día recogéis y
quemáis varitas secas. Por la ley de Moisés ni uno de vosotros quedaría vivo.
Si esta ley se aplica por letra, ella lleva a un entendimiento mecánico de las
cosas. El sentido interno de la ley es otro. Bajo las palabras varitas secas
Moisés entendía los pensamientos, los sentimientos y los actos impuros del
hombre. Por lo tanto, cada uno que da sitio a sus pensamientos, sentamientos y
actos impuros, por sí mismo se encadena a la muerte. Como no entendían el
sentido interno de esta ley, los hebreos se detuvieron sobre su lado externo.
Así
que, el hombre tiene necesidad primero de un pensamiento puro que libera el
cerebro de todos los sedimentos e introduce más luz. El que tiene pensamientos
puros, él nunca sufre de dolor de cabeza. Cuando el hombre tiene pensamientos
puros, ante cualquier contradicción o turbación con que se enfrente,
internamente él no vacila.
La
segunda cosa necesaria para el ser humano es que tenga sentimientos y deseos
puros. Los sentimientos y los deseos se reflejan sobre los pulmones. Si los
sentimientos y los deseos del ser humano son puros, sus pulmones estarán en un
perfecto estado de funcionamiento. Ninguna inquietud, ninguna sofocación,
ninguna tuberculosis lo va a asustar. La tuberculosis no es una enfermedad
orgánica. Ella se debe a sentimientos y deseos anti-naturales en el ser humano.
El tuberculoso ordinariamente es sospechoso y envidioso. Él no puede aguantar a
la gente alrededor de sí. Cada sentimiento negativo – envidia, sospecha, se
refleja sobre los pulmones del ser humano. ¿Por qué el hombre debe envidiar a
los demás? Todas las plantas, animales, gente, están creadas para vivir.
Tal
como tú vives, así ellos tienen derecho de vivir también. Pero tú ahora estás
enfermo. No pasa nada, alégrate de la salud de los demás. ¿Qué aprovecha el hombre si toda la gente desaparece y él se
queda solo en la Tierra? ¿Qué aprovecha el hombre si se queda a vivir solo con
una pierna o con un brazo? - No, toda la gente tiene derecho de vivir, de estar
sanos y de alegrarse de los bienes que se le han dado.
Ahora
regresaremos de nuevo al tema de las nubes que empiezan a elevarse poco a poco.
La elevación de las nubes muestra que entre la cámara baja y la cámara alta de
los dos mundos, ocurre una reconciliación. La cámara baja envía delegados que
traen sus ofertas a la cámara alta para ponerse de acuerdo mutuamente. Sobre la
base de la misma ley, si entre la cámara baja y la cámara alta dentro de cada
hombre no ocurre un cambio que lleve a la reconciliación, ninguna elevación se
puede esperar. Por lo tanto, entre el mundo físico y el Espiritual, también
debe existir un acuerdo total. Cada ser humano debe estar de acuerdo con el
mundo Espiritual. Cada conflicto del hombre con el mundo Espiritual, se refleja
dolorosamente sobre sus pulmones.
Si
el hombre está en conflicto con el mundo físico, tendrá dolores en su barriga.
Si está en conflicto con el mundo Divino, sufrirá de dolor de cabeza; sabiendo
esto, vosotros podéis curaros solos. Cuando os duele la cabeza, procuraréis
erigir vuestro comportamiento hacia el mundo Divino.
Si
sufrís de dolor en el pecho, erigiréis su comportamiento hacia el mundo
Espiritual. Si sufrís de dolor de barriga, erigiréis vuestro comportamiento
hacia el mundo físico. Cada enfermedad del ser humano tiene causas profundas.
Esto no es arbitrario. La ciencia actual y la medicina no buscan las causas
internas de las cosas. Ellas observan todos los fenómenos de la Naturaleza y de
la vida por su lado externo material.
¿A
qué se deben por ejemplo las punzadas en ciertas partes del cuerpo? - Estas se
deben al estrechamiento de los vasos capilares del organismo. Se sabe que los
capilares sirven a la circulación. Ellos transportan la sangre por todas partes
del cuerpo.
Cuando
los vasos capilares de la zona del pecho se estrechan, la electricidad en el organismo la cual trae la luz no puede
circular correctamente, a consecuencia de lo cual ella se acumula más en
ciertas zonas como el vapor del agua en la caldera, y produce punzadas en estos
sitios.
En
un lenguaje científico, nosotros llamamos a estas punzadas “rellenos
eléctricos”. Frecuentemente la electricidad amorfa se une con la electricidad del
organismo humano y se produce una pequeña explosión que el ser humano siente
como dolor.
El
mundo superior ha tomado la electricidad del inferior y si no sabe esto, el ser
humano dice que tiene punzadas en el corazón, en la cintura, en los riñones,
etc.
¿Qué
debéis hacer para liberaros de las punzadas? –
Introducid
más calor en su organismo. Que introduzcáis más calor en vuestro organismo
significa que cambiáis el estado de vuestros sentimientos. Cuando cambiáis
vuestros sentimientos, vosotros enviaréis más sangre hacia aquella parte de
vuestro cuerpo en la cual sentís las punzadas. Una vez que esta parte se
calienta, las punzadas desaparecen. Entonces el hombre puede curarse con un
pensamiento fuerte, con sentimientos positivos y superiores, y también así con
agua caliente.
Ahora
como explico la causa del estado doloroso de la gente, yo no tengo en cuenta
sus errores. Los errores de la gente no representan algo esencial. Si hoy el
ser humano comete un error, mañana lo corregirá. Cuando el pintor dibuja un
cuadro y no pone algunas líneas en su sitio, esto no es error. El objeto que
dibuja no había estado bien iluminado, por lo cual el pintor no lo ha visto
como debería de ser. Una vez que el objeto se ilumine bien, el pintor corrige
las líneas que no ha puesto en su sitio. Con frecuencia las condiciones
externas llegan a ser la causa de ciertos errores de la gente. Cuando estas
condiciones cambian, los errores también se corrigen. Sabiendo esto, vosotros
debéis revisar sus pensamientos y sentimientos, para que veáis si están de
acuerdo con las formas a través de las cuales se expresan.
Por
ejemplo, alguien dice que ama mucho a su amigo. ¿Qué entendéis bajo las
palabras amo mucho o me aman mucho? Que
amáis mucho a alguien significa que le dais mucho. ¿Dais en realidad mucho a
aquel que amáis? Así que cada pensamiento y cada sentimiento expresados por el
hombre, deben corresponder al contenido que estos incluyen en sí. Además de
esto, cuando decís que amáis a alguien y le dais mucho, el también debe de dar.
Decís que Dios os ama mucho, pero vosotros no dais nada. ¿Que sigue de tal
amor? ¿Que hace el país cuando los ciudadanos no pagan regularmente sus
impuestos? - Viene el recaudador con la orden de embargo, vende todo lo que
encuentra en sus casas y toma por la fuerza aquello que deben al país. Así que
procurad que estéis en armonía con el mundo Divino.
¿Cómo
se puede lograr esto? - evitando cualquier conflicto entre vuestros
pensamientos, sentimientos y actos. Las criaturas que viven en el mundo Divino
no cometen ningún error. Entre ellas existe una armonía total. Ahí no hay
condiciones para errores. Sabiendo esto pues, tengan a estas criaturas como
modelos de buena vida. La gente en la Tierra disputa y discute por nada.
¿Cuándo se pelean dos personas? - Cuando los
dos se vuelven positivos. En esta situación los dos tienen deseos iguales. Por
ejemplo, los dos se pelean por una vaca que quieren retener para sí, cada uno
tiene el derecho de desear la vaca por que se aprovecha de ella, pero ellos
deben repartir los bienes que ella da.
Si
la vaca da 10 lts de leche, los dos tomarán 5 lts cada uno. En cuanto se
refiere a los gastos de la vaca, los dos deben repartirlos por igual. Si los
gastos diarios de la vaca suben a unas 30 levas, los dos deben pagar 15 levas
cada uno. Por fin hay otra solución de la cuestión: uno puede aprovecharse de
la vaca los primeros seis meses, y el otro – los siguientes seis meses. Si se
quedan a solucionar la cuestión de una manera mecánica, a través de violencia,
ellos no llegarán a ningún resultado. El que es más fuerte, obsesionará la
vaca. Sin embargo, ocurre que el enemigo llega a ser más fuerte.
Entonces
él obsesionará la vaca. No, la violencia no soluciona las cuestiones. Por lo
tanto, si queréis tener entendimiento, debéis aplicar la ley de la
transformación de los estados. Si dos personas al mismo tiempo son positivas,
ellos sin falta se van a repeler. Para que no ocurra esto, uno de ellos debe
ser positivo y el otro – negativo.
Dicho
con otras palabras: la gente no se entiende cuando entre ellos no existe una
conexión interna física, Espiritual y Divina.
Entonces
ellos se encuentran en tales comportamientos en que se encuentran la luz y la
obscuridad, a consecuencia de lo cual se repelerán. Cuando tienen un punto
común en el mundo físico, Espiritual y Divino (o sea tres puntos comunes),
ellos se entienden completamente. El amor entre ellos es fuerte. Cualquier
trabajo que empiezan lo terminarán bien. Si la relación entre dos personas está
solo en el mundo físico y Espiritual, su amor es débil. Y por fin, si ellos
tienen solo un punto común en el mundo físico, su amor es más débil todavía.
Así que os deseo que tengáis entre sí tres puntos en común, que estéis
relacionados en los tres mundos.
Decís
“¿Cómo vamos a hacer esta conexión y cómo vamos a encontrar el mundo Divino y
el Espiritual?” –
Muy
fácil. Encontraréis una persona que sabe el camino hacia estos mundos y
andaréis tras ella. Que preguntéis a alguien sobre algo que no sabéis, esto
está en el orden de las cosas. Y el científico pregunta de cosas que no sabe.
Si algún profesor cae en la montaña y no puede orientarse, sin saber la
dirección que debe tomar, él se dirigirá al primer pastor de ovejas que
encuentre y le pedirá que le enseñe el camino. En la montaña el pastor es profesor,
y el profesor alumno. Cuando el pastor desciende de la montaña a la
Universidad, ahí los roles cambian: el pastor llega a ser alumno, y el profesor
le enseña.
Por
lo tanto, como alumnos de la Gran Escuela, vosotros debéis escucharse. Quien
quiera que os hable, escuchadle bien, con paciencia. “Pero nosotros sabemos lo
que él nos habla.” - No, cuando habla, cada hombre introduce algo nuevo en lo
que cuenta, si diez personas te cuentan un mismo cuento, cada uno introducirá
algo nuevo que es característico de él mismo y de su entendimiento. En un mismo
cuento, pueden cambiar los objetos, y cuando el objeto cambia, con esto cambia
el carácter del cuento. En un mismo cuento, alguien habla de la vaca y otro –
del caballo. Si se habla de la vaca, el cuento tiene un carácter físico. Si se
habla de caballo, el cuento tiene un carácter mental. En el aspecto mental, el
caballo se encuentra más alto que la vaca. Hoy día todos ordeñan la vaca para
que ella aprenda a dar. Por naturaleza la vaca no es generosa. Cuando la
ordeñan de una manera física, le enseñan a ser generosa. Si patea, le enseñarán
a dar a la fuerza.
Por
lo tanto, cuando roban a alguien esto muestra que él no ha sido generoso. Hoy
día le obligan a dar con fuerza. El robo existe por causa de esto, que la gente
no es generosa. Si la gente fuera generosa, ningún robo existiría. ¿Pueden
ocurrir robos a las fuentes? Cuando tenéis solo una botella de agua, el robo
puede ocurrir. Sin embargo, si tenéis una fuente delante de sí ningún robo
puede ocurrir.
Donde
ocurren robos, ahí existe escasez. La escasez obliga a la gente a robar, a
consecuencia de lo cual ellos disputan acerca de quién se ha atrevido a
derramar el agua de su botella. La contienda y el descontento entre la gente
son procesos del mundo físico. No penséis que si tenéis riquezas grandes,
conocimientos y una fuerza grande, vosotros estaréis contentos. En esta
situación la gente de nuevo estará descontenta.
El
hombre puede estar contento solo cuando está conectado con el mundo Divino,
cuando tiene pensamientos y sentimientos puros. No hay cosa más grande para el
ser humano que esto, que se conecte con el mundo Divino. En esto se esconde la
fuerza, la riqueza, el conocimiento y la salud del ser humano. Ahora cuando
hablo de los fundamentos de la salud quiero que aprovechéis de ellos para que
podáis curarse solos.
Cada
enfermedad representa una escuela experimental para el hombre. A través de las
enfermedades, se prueba la fuerza del pensamiento humano. Si con su pensamiento
el hombre no puede librarse de su dolor de cabeza, ¿es fuerte este pensamiento?
O ¿qué clase de amor es este si con él, el ser humano no puede mejorar el
estado de sus pulmones? Si vuestro amor hacia la humanidad - del cual habláis -
no es capaz de superar vuestro desarreglo estomacal, este amor no es fuerte.
El
amante lleva sus enfermedades con alegría. Cuando le duele la cabeza o la
barriga él canta. Haced lo mismo vosotros también. Cuando os duele la barriga,
empezad a cantarle. Que cada uno de vosotros componga una canción para el dolor
de su estómago y que la cante. Cuando cante esta canción dos o tres veces, su
dolor desaparecerá. Si no cantáis a su dolor, durante horas daréis vuelta sobre
la cama y sufriréis. El que no se cura a través del pensamiento, a través de la
música y a través de la canción, él ha perdido su mayor riqueza. Cuando se cura
de esta manera, él se estudia a sí mismo y al mismo tiempo estudia a los demás.
Para
justificarse, la gente dice que se enferma por los alimentos, por los aceites
que utilizan para cocinar. Hoy día se utiliza aceite de oliva, de girasol,
mantequilla de vaca, etc. Muchos se quejan del aceite de girasol. Este se
prepara y se purifica de diferentes maneras, pero yo también les voy a dar una
manera para su purificación. Pongan en una olla dos litros de agua. En esta
agua viertan un litro de aceite de girasol. Pongan la olla sobre el fuego para
que hierva durante 5 - 15 minutos. Después de esto añadir 50 gr de vinagre y
dejad la olla al lado, hasta que las sustancias inútiles – ácidos y bases – se
depositen en el fondo. Por fin, viertan cuidadosamente el aceite y pónganlo al
lado. Así recibiréis aceite puro e inofensivo. Además de esto, vosotros podéis
servirse con las semillas de girasol o nueces. Machacaréis nueces o 100 gr de
semillas de girasol y las pondréis en la comida. Así utilizado, el aceite es
inofensivo. Si lo preparan artificialmente con diferentes ácidos, él se refleja
perjudicialmente sobre el organismo humano.
En
el mundo Espiritual, no existen tales aceites. Ahí no hay tiendas como aquí en
la Tierra. Ahí cada hombre saca el aceite de sus pensamientos, sentimientos y
actos. Si no puede servirse con este aceite, sus pensamientos, sentimientos y
actos son carentes de sentido. El mundo espiritual del cual hablo no está lejos
de vosotros.
De
vuestra vida depende si os moveréis en el mundo rugoso – el físico –, o en el
Espiritual – en el Amor de los ángeles. Si con vuestros pensamientos,
sentimientos y actos os movéis entre los ángeles, ellos se ocuparán de
vosotros, proveerán vuestras necesidades y las satisfarán. Y entonces si estáis
en la montaña y necesitáis comida y ropa, ellos encontrarán un hombre bueno en
la Tierra a través del cual os mandarán todo lo que necesitéis. La gente
contemporánea quiere que le amen sin que ellos amen. Esto es imposible. Los
comportamientos entre la gente son correctos solo cuando están basados en un
amor mutuo. Cuando el amor entre la gente no es mutuo, los comportamientos
entre la gente no son correctos.
Cuando
el amor entre la gente no se manifiesta correctamente, aparecen diferentes
enfermedades: dolor de cabeza, dolor de pecho, estreñimiento, etc. El
estreñimiento se debe a la escasez del agua en la sangre. El dolor de pecho – a
la escasez de calor en los sentimientos. Entonces el hombre llega a ser
caliente por dentro y frío por fuera. En realidad él debe ser caliente
internamente en sus sentimientos, y externamente frío. Cuando los sentimientos
del ser humano son calientes, las piernas, las manos y todo su cuerpo es
caliente, a consecuencia de lo cual él se siente dispuesto.
Así
que estas son las situaciones nuevas que debéis de saber. Cuando aplicáis el
Amor en vuestra vida, él equilibrará el calor y la luz en vuestra vida interna.
El Amor es capaz de equilibrar también las fuerzas que actúan en el organismo
humano. Una vez que regula las fuerzas del ser humano, él le ayuda en la
solución de la cuestión de la alimentación. El Amor soluciona todas las
cuestiones. Él es capaz de arreglar el clima: si es muy húmedo, que lo seque;
si es muy seco y polvoroso, que lo humedezca, que purifique el aire.
Como
habéis venido a la montaña, vosotros
debéis agradecer por todo. Si sufrís de dolor de cabeza, de dolor de pecho o de
dolor de barriga – todo es dado a su sitio. El dolor de cabeza muestra que
vuestro pensamiento es débil. Cuando fortalecéis vuestro pensamiento, el dolor
de la cabeza desaparece. Cuando aumentáis el calor de vuestros sentimientos, el
dolor del pecho desaparece. Cuando empecéis a trabajar conscientemente, el
dolor del estómago desparecerá.
Cristo
dice: “Permaneced en Mi, así como Yo permanezco en Mi Padre.” Bajo las palabras
“en Mí Padre”, nosotros entendemos el Amor Divino. Puesto que Cristo permanecía
en el Amor Divino, por eso Él pudo soportar los dolores y los sufrimientos de
la gente. Cristo era un héroe. Los sufrimientos por los cuales pasó, por muy
grandes que fueron, Él los soportó con alegría.
Toda
la gente habla del Amor, lo buscan, pero no pueden encontrarlo. ¿Por qué? -
Porque quieren retenerlo para sí, obsesionarlo. Ellos caen en el amor
individual. Cuando permanecen por mucho tiempo hambrientos, ellos empiezan a
orar a Dios que les envíe pan de alguna manera. Dios encuentra una persona y a
través de ella envía pan. Cuando tomáis la mano de esta persona, vosotros la
besáis, agradecéis por el pan que os ha traído, os enamoráis de él y queréis
retenerlo para sí. La mano no representa al hombre mismo, ella es solo
portadora de algún bien. ¿Dónde está el hombre? A través de esta mano, vosotros
podéis transmitir su gratitud, su pensamiento a los mundos superiores, pero de
ninguna manera tenéis el derecho de retenerla para sí. En el caso dado, la mano
es una estación transmisora. Si no servís con ella, servíos directamente con
vuestro cerebro. El cerebro es la estación transmisora más rica a través de la
cual podéis transmitir vuestro amor, vuestra misericordia, vuestro cariño por
la gente, etc.
Trabajad
sobre sí para desarrollar sus centros, para llegar a la situación de considerar
que todo ocurre por el bien. Si dos personas se pelean, considerad que esto es por el bien. El
mundo Invisible no dice que ellos se pelean, dice que hablan altamente para
entenderse.
Al
hecho de hablar alto, ellos le llaman amor no entendido. Ejercitad vuestros
pensamientos, sentimientos y actos para que lleguéis al amor entendido. Si no
amáis a alguien, vosotros debéis darse cuenta por qué no le amáis. Cuando os
respondáis esta pregunta veréis que la causa se esconde en uno de los dos: o
bien él no quiere dar o bien tú no quieres tomar. Y lo contrario: o bien tú no
quieres dar o bien, él no quiere tomar. Lo correcto es que cuando él dé tú
tomes; y cuando él tome tú des.
Es
bello el amor entre dos personas cuando el dar y el tomar están en su sitio.
Cuando el dar y el tomar no están en su sitio, el amor entre la gente no es
correcto. Para que vuestro amor esté correcto, aprended a subir a la cima más
alta dentro de vosotros - en vuestra cabeza -, y de ahí enviad su gratitud
hacia Dios por todos los bienes que desde hace miles de años os ha mandado, por
los cuidados y por la guía que ha manifestado hacia vosotros.
Cristo
dice: “Si Me amáis, guardad Mis mandamientos. Ámense unos a otros como Yo os he
amado.”
El
Amor es una fuerza que soluciona todas las contradicciones. Por lo tanto,
cuando el hombre se enfrenta con alguna contradicción, esto muestra que él no
ha aplicado el Amor. Aplicad el Amor en su vida, así como lo entendéis. Si no
lo habéis aplicado como debe de ser, vosotros mismos os corregiréis, así como
el pintor corrige sus cuadros. Las contradicciones con las cuales la gente se
enfrenta, se deben a sus pensamientos, sentimientos y actos torcidos. Así que
si queréis ser sanos, y no sufrir de dolor de cabeza, tengan en su mente
pensamientos puros. Si queréis mejorar el estado de sus pulmones, erigid vuestro
comportamiento hacia el mundo espiritual y también así erigid vuestros
sentimientos. Si queréis tener un sistema digestivo normal, que no sufrís de
vuestro estómago o de su barriga, erigid vuestros comportamientos hacia el
mundo físico, y también así actúen bien
con los que os rodean.
Por
lo tanto, cuando mejore el estado de vuestra cabeza, pulmones y estómago, el
hombre mejorará su vida también. Cuando erige sus comportamientos hacia el
mundo físico, Espiritual y Divino, el ser humano adquiere un cierto capital,
con el cual puede vivir en el mundo Invisible el tiempo que desee.
Si
alguien entra en el mundo Invisible sin capital, pronto le harán volver a la
Tierra. Así que si queréis adquirir un capital mayor, aplicad el Amor en
vuestra vida como un medio para elevar vuestros pensamientos, sentimientos y
actos.
Trabajo
realizado por Rayito y Dimitar
Centre
OMRAAM Institut Solve et Coagula Reus
www.omraam.es
Primer Centro De difusión de la obra Del Maestro OMRAAM
En
lengua Española
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