Un cupido los ha
hecho encontrarse en su juventud cuando sus cuerpos eran eroticamente
apetecibles. Pero ya igual ni se tocan, eso ellos lo saben, lo han asumido,
pero su sabiduría es otra, han cambiado en lo exterior, pero sus almas se
mantienen intactas.
Reflexiono que en esencia estamos acogiendo lo que ya
sabíamos, pero desde esa otra parte reencarnada en ese otro Yo, el cual también
procede de tu Yo Soy Total.
Ese que te ha amado y ayudado a descubrir, eres tú mismo.
Ese otro eres tú en una versión y en un cuerpo diferente al tuyo, dada la apariencia.
El misterio del otro, eres tú.
Ese otro eres tú en una versión y en un cuerpo diferente al tuyo, dada la apariencia.
El misterio del otro, eres tú.
Por eso es la ATRACCIÓN ÁLMICA es una belleza irresistible,
que no es física, no es por posesión del eros, sino por afinidad vibracional.
Porque tú mismo vienes a amarte. Se da en toda relación
afectiva, de padres a hijos, de hermanos a hermanos, de amigos a amigos. Se
puede dar también con tu perrito u otra mascota de casa.
NO EXISTE LA SEPARACIÓN.
Tanto el maestro como el alumno, son lo mismo, etiquetas
para poderse expresar en esta 3d. Son roles que ni más ni menos.
Por eso debería ser un honor impartir conocimientos y no
sentirlo como una carga, la sabiduría es un gozo que hay que disfrutar, pero
también es una bendición y una acción de gracias cuando se recibe, cuando ves
que alguien está inspirado no lo envidies, es para ti, es para servirte
incondicionalmente.
Con la conexión de pareja pasa lo mismo, se produce de
inmediato cuando aparece el Namasté, es el "yo honro eso que eres",
por tanto, es álmica porque te reconoces místicamente en el otro, sabes que
nada te puede dañar, el ego es el que se separa, se siente atacado, amenazado y
se ofende.
El Yo Soy es el
ángel sabio, humilde y bueno, sabe que eso interno vibra en la armonía con todo
el universo exterior, eso es ser y dejar fluir en la variedad y libertad de ese
Ser eterno.
No hay
separación.
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