Descubrir las partes de nosotros que tienen que cooperar para establecer una comunicación desde el corazón hasta el cielo, es lo que nos permitirá establecer un canal de luz con nuestro espíritu, creando un espacio de paz y armonía donde nos podamos dedicar a expresarnos desde el alma.
Para comunicarnos desde el espíritu, debemos enlazar con nuestro Yo superior, allí dónde reside nuestra esencia energética que guía nuestros pasos aquí en la Tierra. Para este cometido debemos tener en cuenta varios factores a fin de consolidar este canal de comunicación con nosotros mismos. Debemos armonizar cuerpo, mente y espíritu para conseguir expresar desde el aliento divino que somos.
Una de las partes con las que cooperar es nuestra intuición, esa sabia consejera que coopera con nosotros desde planos superiores, que muchas veces no hacemos caso o que ignoramos porque le damos más peso a lo que nuestra razón nos dicta. Esta toma de decisiones a veces es tan rápida que no nos damos cuenta que estamos ignorando una parte de nosotros mismos, la parte energética e invisible pero no por ello menos verdadera. Pensamos demasiado y sentimos muy poco, te animo a que estés atento a lo que tu intuición te susurre desde el alma y que la sigas sin meter a la razón a filtrar o no la veracidad de esas sensaciones.
Otra de las partes significativas para cooperar como una totalidad, son los instintos, mensajes que nuestro cuerpo nos hace llegar normalmente como alerta antes situaciones que nos pueden beneficiar o no, aunque nuestra mente piense lo contrario. La sabiduría innata de nuestro cuerpo no puede no tenerse en cuenta, de hecho si vas tomando decisiones en contra de lo que tu cuerpo te dice acabarás pagando las consecuencias, no se saben cuales, pero si las habrá. Tu cuerpo es el templo dónde reside en alma, escucha atentamente sus mensajes y acertarás en aquellas decisiones de vida que tomes.
Si actuamos al unísono, cooperando desde la intuición, instinto y damos relevancia a crear desde la belleza de la luz que somos, podremos establecer una canal cielo-tierra sólido, que se dedicará a que estemos alineados con nuestra parte energética,dando los pasos correctos para sintonizarnos con nuestro propósito, soñando la vida que queremos vivir, estableciendo los mecanismos de cambio necesarios, para recuperar en nuestro centro de toma de decisiones la parte invisible y energética de nosotros mismos, a través de la intuición y nuestro instinto.
Una nueva comunicación para un nuevo estado del Ser, un nuevo paradigma de comunicación, alineándonos con el cielo, enlazando nuestra parte energética para crear una vida significativa descubriendo aquello tesoros que tenemos para poderlos compartir, desde la belleza de nuestra alma, brillando desde el corazón y caminando desde cielo.
Ha llegado de romper los límites de la mente y del miedo, escúchate a ti mismo, camina por el cielo, yo soy otro tú.
Daniel Pellicer de Carli
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