Desde hace tiempo los oráculos vienen anunciando cambios en los puntos energéticos del planeta, pero poco conocen las consecuencias en nuestro cuerpo y en nuestro entorno. Sin embargo, lo más importante será presentarles una serie de herramientas con las cuales usted podrá adaptarse al cambio de forma armónica, y combatir de forma eficaz las molestias físicas.
Un cambio de las vibraciones en nuestro entorno nos debilita en todos los sentidos, nuestro ánimo decae, los días nos parecen más cortos, el estómago se resiente y comenzamos a buscar comidas más ligeras, pasamos el día peleando con el sueño o la apatía y en la noche nos cuesta dormir o nos despertamos varias veces, en fin, es difícil descansar y lograr esa sensación de estar descansados. Los dolores de cabeza o musculares también son parte de los síntomas que genera ese cambio energético, puede que sintamos puyazos en las manos o calambres dolorosos en los pies. Levantarse muy rápido de la cama nos puede producir mareos y finalmente podemos ir al baño a hacer número “2” varias veces en el día y de forma líquida.
Como los cambios no son sólo físicos todo se nos hace más difícil, las temperaturas varían sin previo aviso, las lluvias refrescarán y después nos sofocarán. Tanto el frío como el calor se presentarán más intensos, y como andamos sensibles los sentiremos que nos afecta más de lo acostumbrado, la vegetación a nuestro alrededor toma un color diferente y las plantas se verán tristes. Las mascotas se mostrarán poco tolerantes, buscarán dormir mucho y buscarán más cariño de sus amos, no querrán dormir solos. Los más perceptivos sentirán que ahora los lugares huelen diferente, que los perfumes ya no nos sientan igual, y los olores fuertes serán rechazados por nuestro organismo, aunque los mismos sean dulces y antiguamente agradable.
Por otra parte, nuestra mente también hace de las suyas, una tendencia generalizada a recordar el pasado (bueno o malo) nos invade de noche y de día. Los pensamientos o ensoñaciones están cargadas de violencia o de venganza, las cuales si analizamos bien buscan de alguna manera justicia.
Desde el punto de vista de la tacto, de lo que sentimos en la piel, buscaremos las sombras, recibir directamente el sol llegará a molestarnos, al igual que la luz excesiva. Antiguas dolencias aparecen nuevamente y hasta con más fuerza, y todo esto sucede mientras sentimos que nos debilitamos cada día más.
¿Qué me sucede? será la pregunta interna más común.
La explicación radica en que en realidad nuestros cuerpos están exhaustos, independientemente de la edad que tengas. Solo los niños parecen conservar su energía, puesto que ellos ya vienen preparados para esa nueva realidad.
Nuestro cuerpo pasa todo el día luchando por sentirse como antes, busca desesperadamente encontrar alguna vibración conocida y en esa actividad se cansa mucho, por eso protesta como un niño malcriado y el pensamiento se pone violento.
Nuestras mascotas y plantas que tienen más desarrollado otros sentidos que los nuestros, también luchan por adaptarse a esas nuevas vibraciones y por ser más débiles puede que no lo superen.
El 2016 viene acompañado de muchos cambios, no solamente políticos, económicos, sociales o culturales, sino también energéticos, de hecho a mediados de año la tierra se hará sentir con mucha fuerza en los países orientales, mientras que el resto de los elementales hará de las suyas en el resto del planeta.
Como el 2016 es un año de fuego lo primero que debemos hacer es apagar el exceso de actividad en nosotros mismos, tanto esencias, terapias, actividades o rituales deben estar enfocados en “Apagar” el exceso de energías por parte del elemento fuego. Para esto lo más esencial será el agua.
Para la alimentación debemos incluir frutas que contengan mucha agua, los mismos deben ser injeridos en temperatura ambiente. Comer muy caliente solo te recalienta y te dejará más cansado. Si habitas en un lugar frío y necesitas calorías para enfrentar las condiciones climáticas, evita las comidas muy pesada, funciona mejor si injieres 6 comidas diarias en pequeñas porciones que tres fuertes en el día. La gelatina natural o de sabores ayudará a relajar el sistema digestivo.
El baño diario con agua templada a fría te ayudará a armonizar los cambios y relajar tu sistema nervioso, es importante tomarse el tiempo para que el cuerpo se relaje. Puede que tu cuerpo te pida más de dos baños al día, por lo tanto deberás complacerlo. Los baños antes de dormir son muy aconsejables para lograr un sueño reparador. Si te encuentras en un lugar muy frío igualmente deberás tomar baños diarios, aunque se entiende que el agua estará a la temperatura que te permita disfrutarlo.
Tomar infusiones frías o templadas ayudará a nuestro cuerpo a equilibrarse armónicamente, oír música para relajación ayudará a nuestro organismo a armonizase. Pero lo más importante es hablar con nuestro cuerpo y entorno, hay que explicarle que hay un cambio y que por lo tanto debemos adaptarnos a él.
Para aquellos que les gusta ir más allá o hacen trabajo energético las relajaciones, rituales, meditaciones o visualizaciones deben estar enfocadas a la armonía y aceptar el cambio. Sonidos de lluvia o de agua, sonidos de una suave brisa o de la selva que podemos descargar por internet o en nuestros celulares ayudarán mucho a cualquier actividad energética.
Las esencias que pueden ayudarnos en este proceso son aquellas que “Despejan” o purifican, tales como: Eucalipto, Hierba Buena, Limón, Menta y lima. El alcohol mezclado con cualquiera de estas esencias servirá para armonizar nuestros hogares o cualquier lugar que nos este afectando. Recuerden consentir a sus mascotas y plantas de la misma manera que se consienten ustedes mismo. Deben hablarles, darles cariño, estar pendientes del agua o trabajar con cristales para relajarlos.
Los cambios más fuertes están por venir y comenzarán cuando comience el nuevo año solar, en abril, por eso debemos preparar nuestro entorno y a nosotros mismos con tiempo.
Noemí.
http://juntandocorazones.ning.com/
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