Libro:
“Conectando
con nuestra Paz interior”
Autora: Ashamel Lemagsa
Parte
I
Amados…
Uno de los temas recurrentes en mis mensajes es la Paz
interior, como estado de consciencia primordial para nuestra evolución
espiritual.
Cómo lograr la paz interior en una sociedad tan caótica,
desintegrada desde sus bases.
El ser Humano se siente enajenado, no divisa un futuro
cierto, seguro y eficiente, observa azorado que sus estructuras personales,
sociales, culturales y políticas, caen estrepitosamente a la Luz de la verdad.
Todos sentimos que lo que antes era “seguro y verdadero”,
hoy se manifiesta como una gran mentira, pues ya no se pueden tapar los
resultados de la crisis global.
Los gobiernos se
hunden en sus propios errores, que ya no pueden seguir ocultando a sus pueblos,
la luz de la verdad que siempre se impone.
Las instituciones
religiosas tradicionales se quiebran ante los hechos de corrupción en sus
estructuras.
La verdad siempre sale a la Luz y hoy en día más que
nunca se lo puede ver, pues ha llegado el momento de comprender que el “hábito”
no hace al monje o un cargo político no
hace a un ser Humano realmente comprometido con la palabra acordada, pues no
siempre el que “predica el bien general”, cumple con lo que dice, los hechos
son la mejor respuesta y la verdad
siempre llega.
Por ello, mantener la Paz Interior ante tal magnitud de
caos social, político y económico es esencial para continuar fluyendo en la
corriente de la vida.
Paz
Interior, no es exclusividad, de algunos.
En otras épocas la búsqueda de la Paz Interior, estaba
circunscripta a unos pocos eruditos, religiosos, teólogos, filósofos, sabios,
hoy en día es y debe ser el timón de nuestras vidas, para que nuestro “barco
humano”, no se pierda en la desorientación propia de las tormentas mentales,
emocionales y espirituales creadas por el mismo ser Humano tanto
individualmente como en la sociedad.
La paz interior es nuestra fuente de energía interior que
logra protegernos del caos exterior y nos mantiene en equilibrio, integrando
todos nuestros aspectos, siendo la guía adecuada para fluir cada día en la
corriente de la Vida.
Entonces…
Si la paz interior es la fuente y guía de nuestras vidas,
cómo conectarnos a ella…
Cómo mantenernos conectados a ella, a pesar de los contratiempos
cotidianos…
Nuestro encuentro con la
Paz Interior.
Llegar a la paz interior, puede ser un estado momentáneo
de la consciencia, que logramos a través de diversos medios, como puede ser la
lectura de algún texto espiritual, un video motivacional, meditando, escuchando
una conferencia sobre temas relacionados
con la paz o música relajante, pero que sucede cuando las crisis, el
estrés, los problemas de salud, la pérdida del trabajo, el fallecimiento de un
familiar, nos golpea sin darnos respiro…
¿Cómo
logramos en las crisis mantener viva la conexión con nuestra paz interior…?
Lo primero que debemos aceptar en nosotros que existe la fuente
de paz eterna a pesar, que en momentos críticos creemos que nos desconectamos
de ella, dudando de su real existencia.
Pues, entonces…
¿Cómo mantenernos
conectados, a pesar del caos exterior, que nos saca de nuestro centro de paz?
Algunas pautas o sugerencias a seguir…
1.-
Aceptar su existencia como
parte de la naturaleza Divina del Ser Humano.
Aceptarla como eterna y permanente en nuestro interior, a
pesar que exteriormente no la veamos reflejada en muchos seres Humanos y hasta
a veces en nosotros mismos.
La Paz Interior está siempre, estuvo y seguirá
existiendo.
El mar existe, aunque muchos no lo conozcan
personalmente, la Tierra gira alrededor del sol y siempre giro, a pesar que
antiguamente no lo lograban comprender sin los estudios científicos de hoy en
día y si cruzamos el “horizonte” no vamos a caer en un precipicio, porque la
Tierra es esférica…
Nuestra falta de conocimiento no implica necesariamente
la no existencia de algo que desconocemos.
Al sentirnos seguros de su existencia en nosotros, de su
presencia absoluta, esa certeza nos tiene que otorgar la tranquilidad que a
pesar de las dificultades que debemos sortear cada día, ella está ahí presente
conduciéndonos a la Sabiduría y a la calma.
2.-
Mantenernos conectados a nuestra la Paz Interior estableciendo prioridades y
límites en aquellas actividades que nos desconectan de nosotros mismos y de los
otros.
Amarnos a nosotros mismos, es el camino directo a la paz
interior.
Cuando nos amamos a nosotros mismo desde el corazón,
sanamos heridas, soltamos “cargas”, transitamos la vida sabiendo que todo es
efímero, que la eternidad está en nuestra Divinidad, Dios en nosotros, pues
somos una chispa de él encarnada en este cuerpo tan Humano como Divino.
¿Cuándo se produce la
“desconexión” con nuestra paz interior?
Cuando permitimos que la mente/ego conduzca nuestra vida,
dejando de lado la energía del corazón, es decir, el amor, este corte de
energía que hacemos consciente o inconscientemente, induce a la desconexión de
nuestra alma con la realidad que creamos.
Entonces… vemos como nuestra sociedad está conformada por
individuos desconectados de sí mismos y de los otros.
Aquí quiero hacer una apreciación personal sobre la influencia de los medios
tecnológicos, las redes sociales y la adicción a las mismas, como factor que
propicia la desconexión interior de ser Humano.
La tecnología como es el caso de los celulares, Tablet,
PC, y las redes sociales fueron creadas para conectar y facilitar las
comunicaciones, con ellas las distancias, los distintos idiomas, dejaron de ser
un problema para las comunicaciones, facilitan la eficiencia, la rapidez para
conectarnos, resolver problemáticas laborales, agilizar trámites y otras
instancias que antes requería movilizarlos perdiendo tiempo y gastando
recursos.
Hoy todo es facilitado en tiempo y recursos, a través del
internet y la tecnología unos de los tantos beneficios, pero lamentablemente, están
siendo utilizados y promovidos para crear una adicción a los mismos.
Como resultado del uso inadecuado, vemos una sociedad
constituida por individuos desconectados de sí mismos y de los otros.
Los celulares, las Tablet, las redes sociales y los
medios de comunicación nos alejan y desconectan de nuestra fuente interior,
cuando son utilizados como una adicción a los mismos.
La inteligencia artificial es otro elemento más que
contribuye a fomentar seres Humanos desconectados de sí mismos, con el
argumento de la búsqueda de información rápida y eficaz, distraen tiempo al ser
Humano para que se escuche desde su interior y encuentre las respuestas a sus inquietudes
cotidianas.
Debemos tener en claro que tanto internet, como la tecnología, como
las redes sociales pueden facilitar nuestras labores cotidianas, pero
utilizadas de manera adictiva y dependiente para cada acto que ejecutamos, nos
aleja de nuestras conexiones reales, como son la familia, amistades, compañeros
de trabajo, la conexión con la naturaleza y con nuestra Fuente interior.
Nos incrementa la ansiedad de estar informados,
actualizados y participar en redes sociales al instante, todo se transforma en
urgencia y de respuestas breves, simbólicas de signos y stickers que intentan
reemplazar el lenguaje responsable y respetuoso.
Ya casi nadie sabe esperar, la paciencia se diluye por la
ansiedad, la angustia o el miedo a no recibir la solución esperada o la
respuesta al instante.
Todos tratan de controlar al otro según las tendencias de
las redes sociales del momento, descuidando su propia vida.
Se afianza la costumbre de buscar respuestas desde
afuera, en un “buscador” cuando en nosotros existen herramientas suficientes
para encontrar las respuestas adecuadas a cada problema que se nos plantea.
Caminamos en “piloto automático” y somos nosotros los
únicos responsables de su utilización desordenada, impulsiva e ineficiente,
pero también somos capaces de regresarlas a su verdadero origen… una
herramienta de trabajo y comunicación para facilitar tareas y a veces
entretener o informarnos, sin dejar de lado nuestra interioridad espiritual.
La tecnología
utilizada para agilizar tareas y dejarnos más tiempo para estar con nosotros
mismos y con nuestros seres queridos, es un gran progreso para la sociedad,
pues nos conecta, ampliamos nuestros conocimientos y los podemos compartir con
otros.
Recordemos,
el verdadero valor de tiempo dedicado a nuestros afectos!
En este Plano nadie es eterno, por lo tanto no podemos
regalar nuestra atención a las redes sociales, dejando de lado a nuestros seres
queridos que también necesitan vernos, escucharnos o ser escuchados.
Debemos cambiar las prioridades entre las redes sociales,
la tecnología y los otros, principalmente tú, pues cuando te desconectas de ti mismo,
te alejas de la creatividad para construir una sociedad libre y soberana en sí
misma.
El tiempo que le dedicamos a mantener “vivas” y activas
las redes sociales, se lo quitamos a nuestro crecimiento espiritual, a la familia,
a los seres queridos.
Cuando la tecnología y las redes sociales, dominan
nuestra vida diaria, nos alejan de la esencia, la Paz Interior.
3.-
Crear y adquirir hábitos de vida que nos dignifiquen.
Todo hábito que nos conduzca a mejorarnos como seres
Humanos, acercándonos a nuestra propia fuente de energía interior, debemos
continuarlo para que evolucione junto con nuestra espiritualidad, ambas,
hábitos y espiritualidad, están conectadas entre sí.
En la actualidad, se trata de calmar la ansiedad, el
miedo, la soledad, la angustia, el estrés con recursos poco saludables, algunos
de ellos tóxicos que crean más dependencia y bloquean nuestra capacidad para
decidir para ser libres y creativos de nuestro propio sendero de vida, dejamos
de ser independientes, para
transformarnos en esclavos de hábitos que nos enferman más aún, a nosotros y a
nuestro entorno.
Las costumbres o hábitos socialmente aceptadas como
“comunes” y cuasi normales, que en realidad nos quiebran interiormente, no son
sanos para nadie, aunque sean aceptadas por casi todos, como es el caso de las
drogas, el alcohol, el tabaco o los descontroles alimenticios.
Si enfocas tu vida en sanarte desde la firme creencia que
eres una Chispa Divina encarnada en un cuerpo físico, que llegó a este tiempo
para evolucionar y ser mejor cada día como Ser Humano, siempre encontrarás
soluciones que te acerque a tu Luz interior.
Recuerda…
Los obstáculos son pruebas para que regreses a ti mismo
desde la Luz y te conectes con tu propia Fuente y llegues a tu paz interior.
Te doy algunos ejemplos:
La
soledad.
Te aporta el silencio necesario para escuchar tu “ruido”
interior, aceptarlo y aprender a calmarlo desde otro aspecto que no sea la
compañía permanente con los otros, es decir, estar primero en paz contigo mismo,
para saber estar en paz con los otros de esta forma te afianzas a tu libertad e
independencia interior.
La
angustia.
Te puede aportar el impulso para sobrellevar las
dificultades, para sobrevivir, aceptando que eres más fuerte que tu angustia.
Victimizarse no es el camino para superar la angustia,
los victimarios y las víctimas son roles que ambas partes aceptan, pero puedes
desecharla en el mismo instante que sientes en tu interior la energía Divina,
que te sostiene siempre.
El
estrés.
Es una emoción que te altera tu capacidad de
discernimiento tomando decisiones incorrectas,
en momentos poco propicios perjudicándote tanto a ti como aquellos
conectados a tu vida.
¿Cómo soltar el estrés?
Siente en tu interior un lago de aguas calmas, que no se
agitan por el viento, ni la lluvia, todo es tranquilidad y luz. Conéctate con tu paz interior, sin necesidad
de recurrir a soluciones externas a ti, que te ponen en riesgo de adquirir una
adicción.
En ti está la fuente viva de paz y alegría, de esperanza
y fe.
Entonces…
La soledad, la angustia o el miedo, todas aquellas
emociones que nos dinamitan nuestra vida y surgen cuando nos frustramos,
desilusionamos o nos comparamos con otros y todo en su conjunto son las
causantes de la desconexión con nuestra la paz.
Parte
II
¿Cómo evitar la desconexión
con nuestro ser interior de paz?
*Aceptar la
realidad que no podemos modificar y
aquellas si podemos cambiar, haciéndolo desde el perdón, el amor, el respeto,
la paciencia, la fe en nuestra capacidad de encontrar la solución adecuada para
cada problema.
*Detenernos un
instante y enfocarnos en nuestro lago interior de paz y sentirlo tan real
como la vida misma.
Podemos visualizarlo en cualquier situación, por ejemplo,
caminando, entre una multitud de personas, cruzando una avenida, en el trabajo
o en cualquier momento, simplemente es visualizar el lago, respirar profundo y conducir
ese enfoque a nuestro interior, a la misma Fuente.
Les aseguro que se siente paz, quietud, armonía, yo lo
aplico en situaciones donde parece que mi paciencia se fuera a quebrar, pero en
mi paz, se restablece el equilibrio.
¿Cómo mantener este ritmo
de paz en la vida cotidiana?
*Valorando
y agradeciendo los pequeños “regalos” de la vida cotidiana,
como por ejemplo, el amanecer de cada día, poder disfrutarlo, el vuelo de las
aves, caminar libremente, utilizar nuestro vehículo físico plenamente,
conversar con nuestros amigos, pasear con nuestra mascota, saludar a nuestros
vecinos desde la cordialidad, ver jugar y crecer a nuestros hijos, nietos o
simplemente a los niños en una plaza.
*Sintiendo, sentir siempre el vaso “medio lleno”, sabiendo que la parte vacía, existe
hoy, pero mañana puede completarse.
*Soltando
el dolor que no
nos aporta nada nuevo, más que más dolor en todo lo que realizamos cada día.
*Recordando
que lo lindo y lo bueno es el resultado de muchas
situaciones a veces dolorosas, incómodas y hasta injustas, pero las atravesamos
y superamos sanándolas con paciencia y amor.
*Reconocer
que todo acto que realizamos origina una consecuencia,
que no somos conscientes de su alcance, por lo tanto debemos ser responsables
de los mismos y rectificar los errores desde la humildad y el respeto.
Un acto irrespetuoso, indiferente, deshonesto dirigido a
alguien o a una comunidad, no solo altera la vida de una o más personas,
también desequilibra nuestro propio sendero de vida y nuestra conexión con
nuestra paz interior, con nuestra Divinidad
*Fe,
es la certeza absoluta de la presencia de la Divinidad en
nosotros, pues somos una Chispa Divina encarnada, viviendo infinitas
experiencias en nuestro recorrido por las innumerables existencias.
Entonces…
La fe no es ciega es seguridad, certeza que estando
conectados a nuestra Divinidad, el camino que emprendemos cada día es el
correcto, pues tenemos la capacidad desde nuestro sentir profundo, que se
expresa en la intuición, cuando la respuesta a una decisión no es la adecuada
para nosotros, lo sentimos a partir de una sensación de vacío o inquietud.
Cuando llega la inquietud de la mano de nuestra
intuición, es un mensaje de nuestra paz interior que nos reclama una mirada
hacia el camino correcto, al verdadero, aunque a veces nos parezca
exteriormente algo incómodo o incierto, finalmente el resultado le dará la
certeza al mensajero, la Divinidad.
Concluyendo…
Cuando sientas un caos en tu interior o cuando el caos
exterior te golpee e intente ingresar en ti… detente, respira profundamente, en cada inspiración regresa a
tu Fuente interior, con cada exhalación suelta el caos, que no te pertenece.
Observa el entorno desde el amor, comprendiendo que todos
somos distintos, pero iguales desde la Fuente Divina y aunque veas seres Humanos donde sus actos son realmente dañinos para la
sociedad y para sí mismos, recuerda que son seres desconectados de su Fuente
interior, que sus mentes/egos los separó del corazón, desconectándolos de la
paz interior.
Entonces…
No te aferres a lo que no te pertenece y sigue tu propio
camino, regresa a ti mismo y bendícelos a todos aquellos que te critican o juzgan,
pues nada está perdido totalmente, algún día los “desconectados” lograrán
sentir el camino a sus corazones, a la Luz interior.
Recuerda, más allá de la Humanidad, de sus actos,
emociones, pensamientos… la vida continúa, fluye, jamás se detiene.
Cuando llegue el instante sagrado de partir de este Plano
material...
Quizás algunos derramen lágrimas por nuestra partida,
otros nos extrañarán por nuestras ocurrencias y quizás, otros, les dará lo
mismo nuestra partida, pero ten la certeza que todos, absolutamente todos,
deberán continuar con sus propias vidas, pues las historias deben completarse,
seguir fluyendo, como a ti también te sucedió en este Plano cuando perdiste a
un ser amado, es la realidad que se impone con sus leyes que nos gusten o no,
nadie ni nada pueden modificar, por ello, disfruta la vida, encuentra la Paz en
ti, valora el estar vivo y seguir experimentando para tu evolución espiritual.
Entonces…
Fluye con la vida, no te detengas, pero no te desconectes
de ti mismo, de tu verdadero origen existencial… La paz interior, Chispa
Divina… Dios en ti.
El presente Libro "Conectando con nuestra Paz Interior", siendo la autora Ana Isabel Insua, Ashamel Lemagsa, deja constancia que esta prohibido difundirlo de manera pacial o total, sin dejar expresado fehacientemente su autoría.
Muchas gracias,
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