jueves, 28 de diciembre de 2017

Neurobiología del amor. Por Miryam Gomez Obregon


Los seres humanos podemos experimentar confusión debido a la neurobiología del amor que siempre parece tratar de ponernos a prueba, entre lo que deseamos y lo que sabemos que es lo más conveniente para nosotros.

El amor y el deseo

Puedes sentir un fuerte apego hacia una persona durante largo tiempo, al mismo tiempo que sentir un intenso amor romántico por otra que te hace suspirar y te quita el sueño, pero puedes también experimentar deseo sexual hacia otras personas… Pues somos capaces de sentir interés y atracción por más de una persona al mismo tiempo, debido a nuestra biología cerebral. Por eso, para mantener una relación de largo plazo es un buen recurso el tomar la decisión diaria de enfocar nuestra atención y energía en esa persona especial, en vez de buscar otras opciones atractivas en varios sentidos para nosotros, que nos pueden conducir a la separación, y a divorcios, que son eventos difíciles emocionalmente.

Cómo se desarrolla el amor en nuestro cerebro

Por lo que, si has pasado por alguna infidelidad o la estás engendrando en lo profundo de su cerebro… Es importante que sepas que es responsable, en gran parte, la neurobiología del amor, esto te ayudará a quitar algunas culpas innecesarias y enfocarte en trabajar con los aspectos que están en tus manos, a fin de que tu relación sea más satisfactoria, sana y feliz, entender nuestra biología te puede ayudar un poco. Debido a nuestros sistemas cerebrales, desarrollamos:

1. El impulso sexual

Es el deseo que busca gratificación y satisfacerse a sí mismo, produce principalmente: dopamina, endorfinas, noradrenalina y adrenalina, los que hacen que literalmente se nubla nuestro juicio; por eso, suelen ignorarse algunos peligros potenciales. En este punto, la noradrenalina nos da la energía para estar con la pareja realizando muchas actividades, orienta nuestra conducta hacia un objetivo, es cuando nos quita el sueño, se fija atención en esa persona especial y ese impulso busca eliminar obstáculos para satisfacer sus deseos.

2. El amor romántico

Son las ganas y la motivación que surgen por estar con esa persona especial, no sólo en el aspecto sexual. Aquí también está asociada la dopamina, entre otros neurotransmisores; pues durante el sexo y con el orgasmo se suman la oxitocina y la vasopresina, produciendo el sentimiento de vínculo y de conexión con la otra persona. Por lo que el sexo casual, puede resultar en un enamoramiento, aunque no se haya tenido esa idea en mente, debilitando el vínculo de nuestra relación estable en caso de haberla. Según Helen Fisher, el amor romántico es un impulso que nos hace ansiar, y puede incluso, ser más poderoso que el deseo sexual, llegó a esta conclusión, tomando datos procedentes de la investigaciones que ha hecho al respecto estos años, apoyada en las neurociencias y la antropología, principalmente.

Durante un estado de excitación sexual y de orgasmo, se inhiben las áreas del lóbulo frontal, por eso, reflexionamos menos lo que hacemos, nos puede llevar a disminuir nuestra capacidad crítica, debido a la hipoactividad prefrontal. Esto nos puede conducir a tomar decisiones inconvenientes para nosotros, incluso podemos caer en conductas irresponsables con efectos negativos para nosotros mismos y para nuestra relación de pareja.

3. El apego a una pareja de largo plazo

Consiste en la búsqueda de la sensación de calma y seguridad que puedes sentir con una pareja duradera. Algunos expertos como Helen Fisher, afirman que el amor romántico evolucionó para permitirnos enfocar nuestra energía de apareamiento en una sola persona y de esa forma conservar tiempo y energía para otras actividades convenientes para nuestra evolución y la de nuestra especie; a su vez, afirma que el apego evolucionó para permitirnos tolerar a ese ser humano llamado pareja, al menos el tiempo suficiente para criar a un hijo juntos.

En esta etapa, es muy importante cuidar nuestra relación, fortaleciendo el vínculo mediante nuestras acciones, generalmente en esta etapa sabemos lo que agrada y no a nuestra pareja, de manera que podemos construir un ambiente de mayor entendimiento mutuo y mostrar mayor empatía; el tener intereses y pasatiempos en común como los hijos, proyectos, metas, anhelos, y sueños fomentan la unión.

El amor que implica acompañamiento, es lo que muchas parejas ven como la progresión natural de una relación exitosa, pero puede resultar un compromiso innecesario. "Las parejas deben luchar por el amor con todos los adornos", "y las parejas que llevan mucho tiempo juntas y desean recuperar su ventaja romántica deben saber que es un objetivo alcanzable que, como la mayoría de las cosas buenas de la vida, requiere energía y devoción", según investigaciones de Acevedo.


Llega un momento en que los niveles de la testosterona en el hombre bajan y los de la mujer se elevan un poco, lo cual hace que puedan convivir más fácilmente.

Trata de tener presente siempre por qué elegiste a esa persona y qué la hizo y la ha hecho única y especial para ti todo este tiempo… “Uno está enamorado cuando se da cuenta de que otra persona es única” (Borges). ¿Por qué nos enamoramos de una persona en vez de otra? Por varias razones, como el contexto, la proximidad, el misterio, aunados a una lista de cualidades que le pusimos a nuestro amor platónico, generalmente durante la niñez. Buscando de esta manera a personas con sistemas cerebrales complementarios al nuestro. Podemos aprender a amar mejor y a utilizar nuestras diferencias para complementarnos mejor.

“El amor puede evocar emociones muy fuertes en el ser humano, la infidelidad puede conducir a generar emociones negativas con consecuencias de moderadas a graves, pero cuando perdura el amor y hay voluntad, puede sanar esa relación por medio del perdón”.

Las ventajas de tener una relación de largo plazo son muchas para la salud, pero lo fundamental es que esta, es una elección personal, por lo que, podemos construir buenas relaciones de pareja de largo plazo si tenemos la voluntad de hacerlo.

Los matrimonios saludables coadyuvan a la salud mental y física de los individuos, a la crianza positiva de los hijos, a la vez que los protege de algunos problemas mentales, físicos, educativos y sociales. Casi nadie se involucra en una relación de pareja de largo plazo, esperando que ésta misma falle, siempre que haya amor, es loable que motivados por él, hagamos nuestra mejor parte para que las cosas funcionen. En el caso de que las cosas no llegaran a funcionar, nos quedaremos con cierta tranquilidad, porque hicimos lo que estuvo en nuestras manos para rescatar nuestro amor, recuerden que la relación es un binomio que consta de dos partes.

Quizá te estés preguntando: ¿Qué puedo hacer para mejorar mi relación de pareja? Aquí te dejo unas ideas que te pueden servir.

8 Acciones para incrementar la satisfacción en parejas de largo plazo

1. Es recomendable que ambos sigan creciendo en diferentes aspectos de su vida, como: en lo intelectual, profesional y social entre otros ámbitos; con esto crece la admiración hacia la pareja, se mantiene en el suspenso y el misterio acerca de las actividades que realizan de manera independiente. De esta manera, puedes resultar más interesante para tu compañero aunque hayan pasado muchos años, evitando caer en la sensación de saciedad que experimentan algunos individuos cuando sienten que tienen a su pareja muy segura.
Saint-Exupéry decía: “Amar no es mirarse el uno al otro; es mirar juntos en la misma dirección”. Así que toma tiempo para ti mismo y para hacer aquellas cosas que te satisfacen, aquellas que te hacen desarrollarte como ser humano, busquen realizar juntos un proyecto o algún pasatiempo que disfruten, eso te va a hacer más feliz, a la vez que puede ayudar a mejorar tu relación de pareja.

2. Trata de ser amable y cuidadoso, primero contigo mismo; así será más sencillo que seas amable también con tu pareja. Procura ser más consciente, bondadoso y afable, son cualidades asociadas directamente con altos niveles de satisfacción dentro de una pareja.

3. El amor apasionado puede aparecer de manera intermitente, actuando como pequeñas chispas que pueden mantener vivo y acrecentar el fuego del amor. Para ello, es recomendable sorprender de vez en cuando a tu pareja con un pequeño detalle o una gran acción que sea de su agrado.

4. Construye tu unión basándote en una intimidad e identidad compartidas, al tiempo que estableces límites para proteger tu autonomía y la de tu pareja. Proteger la individualidad y la autonomía dentro de una relación hará que experimenten mayores niveles de satisfacción, pues ambos continuarán envueltos en el misterio de su propia individualidad, aspecto que un inicio tanto los atrajo.

5. Fomentar una relación sexual rica y placentera, protegiéndola de las intrusiones de diferentes clases y de las obligaciones familiares. Las parejas con hijos y con bebés especialmente, suelen adoptar responsabilidades y roles propios de la paternidad que pueden resultar agobiantes; recuerda siempre darle tiempo y dedicación a tu pareja, la transición a la paternidad no tiene que alejarlos sexualmente. Mantén apertura a nuevas experiencias y procura aumentar tu flexibilidad física y mental.

6. Utiliza el humor y la risa para mantener las cosas en perspectiva, para evitar el aburrimiento y el aislamiento, pero no para ofender o para denigrar a tu pareja.

7. Ofrece aliento y apoyo, así tendrá más posibilidades de mejorar, pues podría sentirse motivado; en vez de dar sólo críticas negativas, recuerda que tu pareja puede cumplir tanto las mejores, como las peores expectativas que tenemos acerca de ellos. Esperemos lo mejor, y construyamos nuestras frases con más esmero.

8. Estimar y valorar las virtudes y detalles únicos que ha tenido esa persona, mantener en nuestra mente vivas las primeras imágenes románticas e idealizadas de cuando nos enamoramos, te puede ayudar a enfrentar dificultades de la vida de pareja y a resistir los cambios que produce el tiempo.

Conclusiones

Gracias a los avances en la ciencia y la tecnología, podemos tener en nuestras manos una relación que es “fruta prohibida”, con mayor facilidad o disponer de toda la información que poseemos y recurrir a los profesionales adecuados para que nos orienten para tener mejores relaciones, a superar nuestras diferencias y a establecer relaciones duraderas que sean más satisfactorias y sanas, si es lo que deseamos… Pues ambas, son decisiones que están en nuestras manos día a día.

Helen Fisher afirmó: “Tenemos que entrar en el siglo del matrimonio amigable, adoptando un patrón de colaboración que es altamente compatible con el espíritu humano”.

Tú puedes elegir poner atención a aquellos aspectos que pudieran hacer crecer tu relación de largo plazo y que quizás requieran de algo de atención especial, como: “mantenimiento” y cambios, principalmente de tu propia persona. ¿O será que prefieres poner atención a los otros estímulos que te atraen sin importar las consecuencias? Independientemente de la respuesta y de la decisión personal, tenemos que recordar que las consecuencias de la infidelidad no siempre conducen a un desenlace conveniente ni satisfactorio. Generalmente es así para nosotros mismos y para los que se pudieran ver afectados con ello, como los hijos, en caso de tenerlos. El perdón puede ayudar a sanar una relación que sufrió una infidelidad, sin embargo, es una prueba de fuego que muchos no resisten, por lo que se aconseja apoyo psicológico para ayudar a sanar heridas.

Tenemos que movernos hacia una sociedad más colaborativa, donde las características propias de cada género nos lleven a valorar al otro, donde exista un mayor y mutuo entendimiento, recordemos que la célula de la sociedad es la familia, y ésta empieza con una pareja.

Te puede interesar: Test de personalidad y compatibilidad de pareja


Links

· http://www.apa.org/news/press/releases/2009/03/romance-relationships.aspx

· Key Statistics from the National Survey of Family Growth

· https://aifs.gov.au/cfca/sites/default/files/publication-documents/cfca22.pdf

Referencias

· Article: “Does a Long-Term Relationship Kill Romantic Love?” Bianca P. Acevedo, PhD, and Arthur Aron, PhD, Stony Brook University; Review of General Psychology, Vol. 13, No. 1.

· Fisher, H. (2004). Por qué amamos: Naturaleza y Química del Amor Romántico. Santa Fe, Bogotá: Taurus Pensamiento.
 
https://www.psicoactiva.com


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